El consejero de Educación y Juventud compareció en la Asamblea de Madrid explicando cómo será la vuelta al cole tras la pandemia

En materia educativa respecto al Covid-19 no podemos dar nada por sentado.  Lejos de eso, hay que ir actuando sobre la marcha y flexibilizando actuaciones en función de cómo vayan las cosas.  Por esa razón es difícil o poco más que imposible asegurar cómo va a arrancar el nuevo curso escolar tras todo este tiempo en la modalidad del educador a distancia.  Sin embargo, sí que existe un plan sobre cómo será la vuelta al cole tras la pandemia en septiembre.  La idea es que sea presencial, aunque para lograrlo habrá que tomar medidas de higiene y distanciamiento social que alterarán toda la dinámica habitual de los alumnos.  Incluyendo horarios y espacios físicos.

El regreso presencial a las aulas contempla tres posibles escenarios, según ha explicado Enrique Ossorio durante su comparecencia en la Comisión de Educación celebrada hace unos días en la Asamblea de Madrid.

Estos son los escenarios posibles para regresar a las aulas:

-El primero y más optimista consiste en que todos los estudiantes vuelvan a las clases presenciales en septiembre bajo algunas medidas de higiene.  Esta medida “no altera nuestro sistema educativo” tal y como lo conocemos, y según aclara el consejero de educación.

-La segunda opción contempla el volver manteniendo las distancias sociales, que serán, presumiblemente entre un metro y medio y los dos metros, según se estipule.  Estas distancias todavía no están definidas, existiendo cierta confusión entre si quedarán decretadas por el gobierno central o será una decisión asumida por cada comunidad autónoma.  A mayor distancia se incrementaría la dificultad, pero lo más importante será conseguir que los más pequeños tengan la prioridad en volver. 

“Sería importante que los alumnos de Educación Infantil y Primaria asistieran presencialmente a los centros todos los días, porque a su edad es más complicada la educación a distancia y, además, por el problema de conciliación que se genera”, afirma el Consejero de Educación Enrique Ossorio.

-El tercer y último escenario, que nadie lo desea, implicaría que hubiera un nuevo confinamiento a causa de un nuevo rebrote, lo que podría implicar una nueva suspensión temporal de las clases presenciales. Sin embargo, llegada a esa situación, y según destaca el consejero, “la experiencia de este año nos permitiría afrontarlo con mayores oportunidades”. 

Algunas soluciones para resolver la distancia social

La dificultad de salvar las distancias físicas entre los niños obliga a ser imaginativos y a hacer uso de todos los recursos de que se dispongan a nivel de espacios físicos.  Esto incluirá zonas habitualmente reservadas a otros menesteres, como pueda ser el comedor o la biblioteca escolar.

En caso de ampliarse las zonas lectivas, el colegio deberá adoptar nuevas medidas de supervisión para evitar problemas como el acoso escolar y el ciberacoso, maximizando las herramientas de detección del bullying.

En este sentido, se baraja la posibilidad de dividir las clases en dos subgrupos, “de manera que algunos alumnos estarían con el profesor y la otra mitad realizando labores de estudio, deberes y repaso”, ha detallado el consejero. “Esta posibilidad requeriría habilitar espacios libres en gimnasios o salas de reuniones en centros educativos, para lo que ya estamos trabajando, con la realización de un análisis en profundidad de los centros educativos y sus posibilidades”, ha subrayado el titular de Educación, quien ha apuntado la alternativa de buscar estos espacios adicionales con la colaboración de los ayuntamientos y otras instituciones.

Podrían adoptarse medidas combinadas para Secundaria y Bachillerato

Para las etapas de Bachillerato y Secundaria, donde se trataría de compatibilizar la educación a distancia con la presencial, con el objetivo de que todos los alumnos asistan presencialmente a clase unas horas al día. “De esta forma, se podrían hacer dos turnos al día y que la enseñanza se reciba parcialmente de forma presencial y a distancia. En estas etapas tenemos la ventaja de que los alumnos pueden acudir solos a los centros educativos y permanecer también solos en sus casas”, ha detallado Ossorio.

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